Supongo que esto es devoción por las propias creencias, por eso aunque le haya costado la cárcel el sigue con lo suyo que no es otra cosas que apoyar el terrorismo de ETA y mantener contacto con los mismos o aquellos que sirven de puente a los que acabarán formando parte de la misma
Seguramente solo sea una muestra más de que la reinserción en muchos casos no existe y algunas personas están dispuestas a repetir una y otra vez los errores cometidos
Si como se hace con los funcionarios que cometen ciertas faltas a estas personas se les inhabilitara para ejercer cargos públicos y por tanto cualquier cargo político, posiblemente sería más fácil acabar con los partidos de colores de Batasuna, mientras tanto seguirán los mismos con distintos nombres
Isaac Asimov: La violencia es el último recurso del incompetente
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